18.2.10

Una última esperanza


Si tenemos en cuenta nuestros hechos nunca sabremos cual habría sido el resultado final si estos no fuesen los mismos,se dice que lo importante no es el camino sino la meta, pues yo prefiero disfrutar del camino,que cada día se hace más largo y de todos modos la meta es la misma para cada uno de nosotros, el cementerio está lleno de valientes que quisieron acabar el camino. No estoy ni mucho menos hablando de suicidios o muertes, sino de cada una de esas ocasiones en la vida en las que hay que tomar decisiones. En mi último post hablaba de los impulsos y deseos, y tras consultar con la almohoda he visto la cara escondida de la luna y me he dado cuenta que al igual que vivimos rodeados de esos deseos vehementes son ellos mismos los que nos hacen caer,por eso hoy quiero al menos apartarlos para ver el suelo que tocan mis pies y no volver a tropezar en la misma piedra.Meditar es bueno a veces, otras no lo es, pero ya que ayer tenía tiempo y hoy es este mismo el que me tortura, voy a intentar deshacerme de ese primer deseo y esa última esperanza para dar paso a la indiferencia. E.

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